Eberswalde – Alemania, 1944

Actualmente vive y trabaja en Colonia y está considerada una de las figuras más representativas de la fotografía alemana, formando parte de la reconocida Escuela de Dusseldorf junto a Andreas Gursky, Axel Hütte, Thomas Ruff o Thomas Struth y notándose en todo su trabajo la influencia de Bernd and Hilla Becher, profesores de tan prestigiosa Academia, demostrando una gran maestría técnica que opta por una fotografía realista, natural y nunca retocada, completamente nítida y una perspectiva típica renacentista de gran profundidad.

La artista está centrada desde hace tres décadas en la realización de un extenso cuerpo de imágenes sobre interiores de edificios, preferentemente de uso público y cuando ha cesado toda actividad y se encuentran vacíos: zoos, bibliotecas, museos, iglesias, archivos, palacios, teatros o bancos. Candida afirma que el hecho de ser espacios para las personas se hace más visible cuando la gente está ausente. Su método de trabajo, que ofrece una enorme continuidad a lo largo del tiempo, es de un gran rigor formal, tanto en la composición como en el tratamiento de la luz, buscando similitudes, contrastes y variaciones en y entre ellas. Toma fotografías exquisitamente enmarcadas que captan la simetría, el diseño y la elegancia de esos espacios creados por el hombre. La aparente austeridad de sus imágenes encierra una compleja lectura de la arquitectura en relación con sus usos y funciones, así como una reflexión sobre la historia de la cultura a la que están estrechamente ligados esos espacios. A veces el efecto es objetivo y distante, otras veces explora la inmensidad del conocimiento humano encerrado en esos lugares y en ocasiones produce cierta tristeza y vacío espiritual.

Su obra puede verse en distintas colecciones de todo el mundo: el MoMA en Nueva York, el Pompidou en París, el Kunsthalle en Basilea o el Kunsthalle en Hamburgo, The J. Paul Getty Museum en Los Ángeles, el Museum of Modern Art en San Francisco o el Reina Sofía en Madrid.